Compost para principantes

A lo largo de este artículo vamos a hablar sobre qué es el compost y cómo funciona. Con esta sencilla guía podremos crear compost a partir de nuestros restos vegetales, residuos de cocina y demás.

¿Qué es el compost?

El compost es el resultado de una descomposición de materia orgánica que realizada a través de una serie de microorganismos con ayuda de aire y agua.

Además de un montón de beneficios, el compost es capaz mejorar la textura del suelo y cualquier otra propiedad física, como la aireación del suelo. También mantiene vivos y aumenta la población de los microorganismos beneficiosos. Éstos compiten con los hongos que se alimentan de nuestras plantas, equilibrando la balanza biológica.

¿Cómo hacer compost?

El proceso para «fabricar» compost es realmente sencillo y tan sólo tenemos que partir de unos residuos que continuamente generamos. Estamos hablando de restos de alimentos, posos de café, papel, restos vegetales de podas y siegas, etc.

Incluso podríamos decir que tenemos un sitio para aprovechar dichos residuos y no abultar en exceso nuestra «bolsa de basura».

Esta «basura» la transformamos en compost sin que nosotros tengamos que hacer nada. Simplemente con microorganismos (no los ponemos nosotros), agua y aire.

El secreto para crear compost es apilar un cierto volumen de materia orgánica sobre la tierra. Como norma, toda la materia
viva y los productos que se suelen pudrir con el tiempo, como el pescado o  los restos de las comidas etc, son ricos en nitrógeno.  Aquello que no se pudre y no suele oler (como la madera, el serrín, las hojas secas, el papel, etc.) tienen un contenido alto en nitrógeno.

¿Cuál es la relación ideal de carbono-nitrógeno? Normalmente es un valor que está situado entre 30 a 1 de carbono con respecto al nitrógeno.

Condiciones a tener en cuenta

Cuando creamos la pila de compost, hay una serie de variables que tenemos que controlar. Una importante es la temperatura, otra la humedad. Estos son los dos factores más limitantes a lahora de fabricar compost.

suelo con materia orgánica

Con el calor y la acción de los microorganismos, la pila de compost puede alcanzar temperaturas de hasta 75 ºC. Esto sucede durante varios días. Sin embargo, no todo el compost se pone a la misma temperatura, por lo que a menudo es recomendable voltear la mezcla para homogeneizar el proceso de descomposición.

Con esto también reduciremos olores, mejoraremos la penetración del aire y la humedad y la formación del compost se hará mucho más rápida.

Si necesitásemos incorporar materia orgánica de rápida descomposición a nuestro suelo, con la idea de mejorar el enraizamiento de nuestros cultivos antes de que se forme nuestro compost, podemos aplicar extractos húmicos. 

Se trata de una mezcla de ácidos húmicos (mejoradores de suelo) y ácidos fúlvicos (enraizante) que mejoran las propiedades físicas, químicas y biológicas del suelo.

Una vez tengamos nuestra pila de compost en perfecto estado y con la descomposición finalizada, ya podremos aplicarla sobre nuestro huerto, con todos los beneficios que conseguiremos por ello.

Saludos.

 

 

 

El suelo, el origen de todo cultivo

En esta entrada voy a dedicarle todo mi tiempo y esfuerzo al suelo. Es, bajo mi punto de vista y el de muchos escritores y estudiosos de la agricultura, la fuente de origen de vida vegetal. No es que sea insustituible (como se puede ver en los cultivos hidropónicos), pero de cara a las plantas que se cultivan sobre tierra, el mayor condicionante de su desarrollo.

En el desarrollo de una planta intervienen muchísimos factores, ya sea el clima, el agua, el suelo, la actividad microbiana, la fertilidad, las labores de cultivo por parte del agricultor, etc.

El agua puede ser más dura o más blanda, el clima (que también es muy importante) puede ser frío, caluroso, húmedo o seco, el agricultor lo puede estar haciendo mal, etc, pero aun así, puede haber una oportunidad para que la planta crezca si el suelo ofrece las mejores condiciones.

suelo agrietado y erosionado

Por contra, un suelo de mala calidad, con mal drenaje, pH fuera de los niveles sobre los que se mueven los cultivos, seco, pedregoso, sin contenido en materia orgáncia, etc., supondrá el fracaso estrepitoso del esfuerzo del horticultor.

No importa que el clima sea el indicado para dicho cultivo, el agricultor sea experimentado ni se disponga de toda el agua necesaria y de gran calidad, será muy difícil cultivar ahi.

Las condiciones que afectan a un suelo

Un suelo está formado por muchas propiedades y elementos vivos e inertes que condicionan su calidad. Si pudiéramos dividirlo en partes lo haríamos de la siguiente manera:

  • Propiedades físicas
  • Propiedades químicas
  • Propiedades biológicas

Las propiedades físicas condicionan enormemente el suelo. Hablamos de su resistencia a la erosión, el tipo de textura que tiene (arenoso, limoso, arcilloso o una mezcla). la disgregación que presenta, la profundidad hasta la roca madre, el drenaje, etc.

Las propiedades químicas están representadas por el contenido mineral que presenta la tierra. Es decir, los distintos compuestos que serán absorbidos por las plantas. El resultado de estos, ya sea en exceso o en defecto, ocasionaría toxicidades o carencias sobre los cultivos, que habrá que controlar.

suelo con materia orgánica

el Ph también es una propiedad química, definida por los compuestos que hay en el suelo. La mayor concentración de unos en detrimento de otros ocasionará que un suelo sea ácido, neutro o básico. ¿Cuál es el mejor? Bueno, está respuesta viene dada por el tipo de cultivo que estemos plantando. Algunos necesitan condiciones de suelos ácidos (por debajo de pH 7) , otros tirando a la neutralidad (moviéndose sobre un valor de 7) y otros suelos básicos, calcáreos, (>7).

Las propiedades biológicas, que si bien no es una propiedades sino más bien el contenido o la densidad que presenta de microorganismos u organismos, supone un factor determinante en cuanto a la calidad del suelo. Un nivel nutrido de microorganismos o organismos mayores, ya sean lombrices, gusanos, larvas, etc) mejoran las propiedades del suelo, en cuanto a que excavan galerías que mejoran el equilibrio entre la parte gaseosa y acuosa del suelo (la relación entre el agua y el oxígeno, por ejemplo), además de conseguir descomponer los restos vegetales que se encuentran de forma natural en el suelo, produciendo nitrógeno (recordad la función de los organismos rizhobios que fijan el nitrógeno atmosférico y las plantas de la familia de las leguminosas, así como su simbiosis e interacción).

Sin lugar a dudas, la presencia de este tipo de fauna en el suelo, que habita de forma natural siempre que el drenaje, el ph o las labores de cultivo por parte del agricultor sean adecuadas, mejoran enormemente las condiciones del suelo, siendo innecesario, en muchas ocasiones, no tener que labrar el suelo, puesto que por debajo de la primera capa o capa superficial (la que normalmente se agrieta por el exceso de lluvia, o se erosiona), las condiciones son muy buenas.

Cómo cuidar el suelo

A partir de lo comentado, será fácil conocer cómo mejorar el suelo partiendo de la base que tenemos. Por un lado, hay que mejorar, siempre que se pueda, el nivel de fertilidad, aportando materia orgánica que se irá recuperando conforme las plantas la vayan necesitando.

Por otra parte tenemos que cuidar que tengamos un drenaje bueno, es decir, que permita retener el agua lo suficiente para que sea asimilable por las plantas, pero que no encharque el suelo. Ante eso, el drenaje se mejora con el arado, la densidad biológica y la incorporación de materia orgánica, que mejora la textura del suelo.

Una vez tengas todo listo y creas que tu suelo tiene una buena calidad, ya puedes empezar a ver técnicas del huerto (vistas en este blog) y a empezar a plantar.

¡Que se os de bien! Saludos.

Plantas que repelen plagas

Hoy vamos a tratar un tema que concierne mucho en esta época actual en la que nos encontramos. Cada vez más se tiende a usar productos ecológicos o de origen natural para solucionar problemas de siempre. Es algo como volver a épocas pasadas, la de nuestros abuelos agricultores, que hacían lo mismo y obtenían grandes cosechas.

La naturaleza está en constante equilibrio. Esto quiere decir que si «algo se sale de madre», es decir, se desequilibra, aparecerá la intervención de algún agente natural para controlarlo. Es algo así como el equilibrio económico de Adam Smith, si aumenta la demanda, la oferta también lo hará.

Si una plaga aumenta, también lo harán sus depredadores, que van a tener fácil disponibilidad de alimentos. Sin embargo, si se aplican productos químicos, se produce el desequilibrio. La fauna útil se ve afectada, las plagas que atacan los cultivos se vuelven más resistentes y gregarias y sus enemigos naturales no pueden actuar con suficiente autoridad. Se ha producido el desequilibrio. FIN.

Para ayudarnos a luchar contra las temibles plagas y enfermedades que pueden llegar a molestarnos, (justo cuando teníamos esos preciosos tomates o pimientos a punto de cosechar y todo iba a ser perfecto…).

Aquí os dejamos un listado de plantas que pueden ayudarnos a luchar contra determinados problemas

¿Son realmente efectivos? Hombre, está claro que su presencia no va a evitar que puedan alimentarse de nuestros cultivos, si son muy agresivas o tienen hambre, pero sí que ayudan.

Listado de plantas efectivas contra plagas y enfermedades

MOSTAZA

Su cultivo es eficaz contra pulgones y áfidos

RUDA

Evita o disminuye la presencia de moscas o polillas

AJO

Es bueno contra pulgón y algún tipo de moscas.

APIO

A pesar de que también nos alimentamos de él, es bueno contra ciertas mariposas que se alimentan de crucíferas.

TOMILLO

Contra la oruga de la col. También puedes descubrir el potencial del timol.

ORÉGANO

Moscas y hormigas

Aquí dispones de semillas de orégano.

ORTIGA

Sobre todo contra pulgones, pero también tiene cierta acción contra hongos.

MANZANILLA

Puede ser preventivo de enfermedades fúngicas como Mildiu

HISOPO

Repele ciertas bulbosas que se alimentan de las hojas de nuestros cultivos.

RÁBANO

Aunque como el apio y el ajo, también nos lo comemos, es efectivo contra ciertos coleópteros y escarabajos.

Recuerda que todas estas plantas, o la mayoría de ellas, también se pueden cultivar como plantas de interior.

¡Saludos!